Hoian

Cogimos un vuelo con destino Danang y después de comer nos acercamos al museo Cham y posteriormente nos preparamos para ir a Hoian.

Había que coger energías porque teníamos que subir 156 escalones en las Montañas de Marmol........¿156? ¿ No serán 1156? Nooo...156 y es muy duro! Después de los 700 de Halong fue pan comido!. Cada montaña representa los cinco elementos y en cada una de ellas pueden visitarse unas preciosas pagodas y lo que es mejor, ofrece unas vistas de la Playa de China espectaculares.


Llegamos a Hoian a media tarde allí ( aquí serían las 15:30 pm aproximadamente ) y como teníamos tiempo aprovechamos para ir a hacernos unos trajes a medida en una sastrería ya que el ratio calidad precio es muy bueno y en menos de un día te lo tienen listo.Yo salí de allí con un vestido y con un abrigo de invierno. ¿ Me cabrían luego en la maleta ??? Este año ya fui preparada!!


Cuando llegamos al hotel flipamos literalmente. Por un momento nos trasladamos a Binibeca ( Menorca) o a Ibiza. Un complejo de casitas blancas rodeadas de vegetación ( y de todos los bichos imaginables ). Bañito en la piscina y a cenar...que ya eran las tantas!! ( 6 de la tarde ).


La mañana la dedicamos a ir al mercado y a vagar por las calles del pueblecito. Todos los pueblos tienen su encanto pero éste en especial no tiene desperdicio. Sólo consta de tres o cuatro calles cerradas a la circulación, con antiguas casas de mercaderes japoneses y chinos y adornadas con farolillos y llena de comercios, cafeterias y restaurantes con una elegancia digna de ver.


Coincidimos aquí con la elección de miss Vietnam y en muchas calles las chicas posaban y les hacían entrevistas.
Nosotras salimos " de relleno " en la tele...y digo de " relleno" de verdad porque las vietnamitas son muy poquita cosa...pero guapísimas eso sí!.


A la hora de comer ya me di cuenta de que las marcas de la camiseta estaban haciendo estragos en mi piel ( Parecía una sueca recién llegada a la playa y eso que yo ya me fuí bastante morena para allá ). Nos pusimos protección con un filtro de 90 y nos " agarramos " unas bicis para irnos a la playa.


Teníamos unos 3 kms. en linea recta para llegar, pero buscando y buscando dónde teníamos que aparcar las bicis nos hicimos por lo menos 25 kms y tardamos como tres cuartos de hora en pisar la playa por lo que empezaba a tener un color torradito tirando a chamusquina. Fue genial!! Hacía ya años que cogía una...pero ya dicen que montar en bicicleta nunca se olvida!. Por unos momentos me acordé de lo que me había gustado siempre moverme con ella. ( Estoy pensando en comprarme una....).


Llegamos a la playa justo al anochecer que es cuando los lugareños de acercan a ella ya que allí lo que está de moda es estar blanquito y a esas horas no aprieta tanto el lorenzo.
Nos dimos un bañito y nos tumbamos a descansar....me podría acostumbrar..pensé. La gente comía marisco fresco en la misma orilla....


Me hubiese quedado un par de días más allí o toda la eternidad! pero al día siguiente nos esperaba Hue.